martes, 7 de septiembre de 2010

Bonito vestido ¿Verdad? Es rojo, ¡Rojo pasión!

Allí estaba yo, tan puntual como siempre, pero más tranquila que nunca. Miré mi gran reloj con forma de corazón y marcaba las cuatro y veintinueve. Justo he tenido que llegar antes que él pensé. Odio que vea la cara de tonta que pongo al recibirle y más con la cantidad de carmín que llevo encima, y eso solo para que mis labios sean más apetecibles... Deseo conseguir ese beso ya. Tic, tac! Queda menos. De 60 interminables segundos por fin quedan 15. Le veo, le estoy viendo! No puede ser, no puede ser, se ha puesto esa camiseta que tanto me encanta... Me saluda, feliz. Andamos un par de cuadritos de cera, cruzamos cuando está parpadeando y en la otra cera decidimos donde ir. Como siempre tuvo una idea genial y decidió llevarme a un bar muy cerquita del mar. Que bonito era aquello, que color tan especial tenia el mar y que ganas tenía de él. Pedimos algo para tomar, charlamos, reímos y nos miramos continuamente, ¿Qué más podía pedir? Ah sí, mi beso. Pero, no tardaría en llegar, eso no lo supe hasta el momento claro. Eran las seis y veintinueve cuando nos dirigíamos hacia una playa cercana y muy solitaria. En el último paso para llegar a lo que sería mi sueño, tropecé y partí uno de los preciosos tacones negros que llevaba. No me dejó caer, me cogió y en brazos me llevó hasta la orilla, como si de casados se tratase. No podía sentirme mejor en aquel momento, el que podía haber sido el momento más vergonzoso de mi vida, se convirtió en un gran momento de pasión. Pues, avergonzada, le agradecí lo que había hecho. Él simplemente se limitó a callarme con un simple, no fue nada princesa. Entonces en aquel momento de "no saber que hacer y/o decir" le besé. No lo esperaba y eso hizo que más le gustara. Sin dudarlo puso su mano en mi cintura y comenzó a subirla hasta que llegó a mis labios y dulcemente me besó, sin yo poder hacer nada para evitarlo. Todo eso era lo que más deseaba, no lo podía creer. No demoró más de 2 minutos en quitarme aquel precioso vestido rojo que exclusivamente me compré para él, yo también le desnudé. En 3 minutos estaba tumbada en la orilla susurrándole que quería más. Y mis deseos se cumplieron.


6 comentarios:

  1. Es precioso! Te sigo gracias por seguirme ;)!

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  2. Holaa !
    Me gusta mucho tu blog :)
    Te sigo a partir de ahora
    y pásate por el mío si quieres :D

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  3. Wow, que pasión.. Me da mucha risa como comienza, proque todas somos asi, ¿Por qué llegue primero?, ¡Debo controlar que cara pongo cuando le vea llegar!.. Esas cosas siempre nos perturban..

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  4. Joder cari, menuda imaginación :P (LLL)
    Te amo :$

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  5. Es muy bonito!! Su amor sería más grande que el mar que tenía en frente...
    Gracias por pasarte por mi blog y seguirme, ahora también te sigo :)
    Besos!!

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