domingo, 25 de marzo de 2012

Mirada fascinada.

Y me miras, como si no hubieses visto nada así jamás. Hago lo mismo. Me distraigo. No sé de donde vienes y probablemente seguiré sin saberlo, pienso. Me fascina que me mires así, como el que no lo quiere, queriéndolo. Pero te vas... Ya no te vuelvo a encontrar. Te busco discretamente. Nada. No pasa nada., no pasa nada...
No lo pienso y te encuentro, yo reía y reía, y es que no te había visto aún... Tú sí. Vuelve tu mirada. Pasas y te giras hacia mi; yo también lo hago, pero ya demasiado tarde... No pienses que no quise seguir mirándote, sólo esperé a que no vieses como lo hacia. Vuelve a pasar y pienso más. Pienso atrevidamente que todo pasó porque tuvo que pasar y te busco. No te encuentro. Dejo pasar los días creyendo que fue una tontería... A raíz de una confusión, que me brindó un nuevo amigo, te encuentro. Y, te acuerdas de mi?


sábado, 3 de marzo de 2012

La espera

La espera de aquello que no va a llegar ya se ha hecho eterna. Comienzo a pensar, aunque me duela, cada vez menos), que esto tenia que pasar. Tuviste en tus manos algo que supiste apreciar hasta cierto punto. Empezaste a tallar el diamante y te quedaste a medias... Te faltaba lo mejor. A las princesas se las trata como verdaderas princesas; no vale un "ahora si", "ahora no" porque irremediablemente, se van. Aún me pregunto si me echas a faltar, si aún me quieres, si aún sientes esa inmensidad tan grande por mi. No hay respuesta. Duele... Me mejoro.